Como una bandada de mariposas, los miembros y las notas de esta banda han estado revoloteando por tu vida (Bueno, por tu vida otaku,friki o fanática del arte oriental), una extraña vida que si se combina con la semiótica y la apreciación artística, conlleva a buenos resultados de crecimiento personal y de deguste del arte, como el que nos presenta esta banda en este álbum que para mi resulta ser el culmen de su larga carrera.
Tal vez si has escuchado los soundtracks de clásicos anime como "Noir", "Princess Resurrection", "Rozen Maiden", "Hack", "Code Geass", "Kiki's Delivery Service" y muchos más, reconocerás la dulce y operática voz de Arika Takarano, y los arreglos de Mikiya Katakura, un genio poco reconocido para mi. Este personaje ha generado a lo largo de su carrera arreglos que se mueven por géneros como el darkwave, el gothic rock y gothic metal, dándole un toque de sofisticación al J-pop, género musical denostado. Este álbum, con una sublime orquestación, y sus homenajes a compositores como Schumann y Beethoven resulta ser su trabajo más complejo, un verdadero deleite, un Opus Magnum de una banda que merece ser reconocida como una de las uniones musicales más fructíferas en la historia.
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